Artrodesis de rodilla: cirugía de salvamento para recuperar la estabilidad de la rodilla sin dolor.
La artrodesis de rodilla es una técnica quirúrgica que busca la fusión definitiva del fémur y la tibia.
Se considera una cirugía de salvamento, indicada en casos en los que no es posible colocar o mantener una prótesis de rodilla, ya sea por múltiples fracasos previos, infecciones recurrentes o imposibilidad de reconstruir el mecanismo extensor. Cirugía de salvamento es cuando se salva la pierna del paciente, pero no se puede conservar o salvar la función normal (flexión-extensión…).
Aunque implica la pérdida de movilidad articular, su principal objetivo es devolver la estabilidad, apoyo y control del dolor, mejorando la calidad de vida de pacientes muy limitados, generalmente con múltiples operaciones, complicaciones del mecanismo extensor o falta de fuerza, por un problema neurológico, general o local.
¿Qué es y cuándo se indica la artrodesis de rodilla?
La artrodesis de rodilla consiste en inmovilizar la articulación en extensión para conseguir una pierna estable y sin dolor.
A diferencia de la prótesis, no busca recuperar el movimiento, sino permitir que el paciente vuelva a caminar, que pueda apoyarse en la pierna sin sentir dolor y realizar actividades básicas.
Indicaciones actuales
💠 Fracaso de múltiples prótesis de rodilla (séptico y aséptico).
💠 Infecciones crónicas con riesgo elevado de reinfección.
💠 Pérdida grave de hueso o partes blandas.
💠 Imposibilidad de reconstruir el mecanismo extensor.
💠 Algunos casos oncológicos tras resección tumoral.
💠 Pacientes con déficit de fuerza por un problema neurológico.
Contraindicaciones y selección del paciente.
La artrodesis no está indicada en:
🔶 Pacientes con artrosis avanzada en la cadera o tobillo ipsilateral, del mismo lado.
🔶 Personas con amputación transfemoral contralateral, amputación por el muslo.
🔶 Situaciones en las que la rigidez empeoraría la autonomía y cuidados del paciente.
Técnicas de artrodesis: cómo elegimos la mejor opción.
Existen varias formas de realizar una artrodesis de rodilla. La elección depende del estado del hueso, la presencia de infección y la experiencia del equipo quirúrgico.
🔷 Clavo intramedular femorotibial
– Alta estabilidad mecánica.
– Permite una marcha más fisiológica.
– Tasas de consolidación superiores al 90%.
– Buena opción cuando no hay infección activa.
🔷Estabilización en extensión
Esta operación no es una verdadera fusión de los huesos de la rodilla. Consiste en poner un clavo cementado, con un componente en la tibia y otro en el fémur y bloquearlo o engarzar los dos extremos mecánicamente (con pernos o tornillos) y con cemento adicional.
A diferencia de los otros procedimientos no hay que aportar hueso, la estabilidad es inmediata y permite añadir grandes cargas de antibiótico local para curar posibles zonas residuales de infección.
🔷 Fijación externa
Consiste en poner unos tornillos que atraviesan la piel hasta el hueso y se fijan a un tutor externo, por fuera de la pierna, como un esqueleto de metal exterior.
En general se debe evitar hacer una artrodesis con infección activa, o se tendrá una pierna rígida e infectada, que acabará fistulizando por la piel en distintos puntos.
Dicho lo cual, en condiciones extraordinarias podría considerarse:
– Indicada cuando hay dudas de si la infección pudiera estar presente o los tejidos blandos no permiten otra técnica.– Ventaja: evita cuerpos extraños internos durante el control de la infección.
– Inconveniente: más riesgo de no consolidación y mayor incomodidad para el paciente.
🔷 Osteosíntesis con tornillos y placas metálicas
– Se emplean menos actualmente.
– Pueden utilizarse en casos seleccionados, sobre todo en pérdidas óseas localizadas.
Posición de fusión y planificación de la marcha.
La posición en la que se fija la rodilla es clave para la funcionalidad:
→ Valgo: 5° aproximadamente.
→ Rotación externa: 0–10°.
→ Flexión: 0–15°, según la estatura y hábitos del paciente.
Esta alineación favorece la marcha, la sedestación y la compensación lumbar.
Resultados esperables: consolidación y tiempos.
➡️ En técnicas de unión ósea directa, la consolidación puede tardar entre 6 meses y 1 año.
➡️ Con técnicas cementadas, la fijación es inmediata, lo que permite apoyo precoz. Es la falsa artrodesis o estabilización de la rodilla en extensión.
➡️ Los pacientes refieren una clara reducción del dolor y mejoría en la estabilidad, aunque con limitaciones funcionales derivadas de la rigidez, sobre todo al sentarse, especialmente si son pacientes altos.
Complicaciones y cómo prevenirlas.
Aunque la artrodesis es eficaz, pueden aparecer complicaciones:
» Dificultad para sentarse o agacharse.
» Dolor lumbar por sobrecarga.
» Discrepancia de longitud en miembros inferiores.
» Retraso de consolidación o pseudoartrosis (en técnicas óseas).
» Infección de la zona quirúrgica.
👉 La elección de la técnica adecuada, la correcta alineación y la rehabilitación individualizada reducen estos riesgos.
Vida diaria tras una artrodesis de rodilla.
Vivir con una rodilla rígida exige adaptación. La fisioterapia y las ayudas técnicas ayudan a recuperar autonomía.
💠 Sentarse y levantarse
– Se recomienda usar sillas más altas y con respaldo firme.
– Colocar cojines para facilitar la sedestación y evitar flexiones excesivas de la cadera.
💠 Vestirse y calzarse
– Bastones de ayuda y calzadores largos evitan posturas forzadas.
– La flexibilidad de la cadera y del tobillo son claves para suplir la rigidez de la rodilla.
💠 Escaleras y movilidad
– Puede subirse alternando un pie por escalón (bajando y subiendo siempre con un pie, de forma no recíproca o no alterna) o usando barandillas de apoyo.
– Se aconseja adaptar la vivienda para reducir barreras arquitectónicas.
💠 Conducción
Muchos pacientes pueden conducir, sobre todo si el lado operado no corresponde al de los pedales, o es un coche automático, aunque dependerá de cada caso y del informe médico
Fusión de rodilla, testimonio real de artrodesis en paciente del Dr. Villanueva.
Fusión de rodilla, un testimonio de Isabel Macías Velázquez.
La artrodesis de rodilla se considera una técnica de salvamento, no de restitución de la función completa de la rodilla, pues esta va a perder el juego normal de la articulación.
Después de tener la rodilla derecha operada muchas veces, por una caída casual y una fractura un poco difícil, ocurrida en el año 1978, en 2007 deciden ponerme una prótesis de rodilla.
De esta operación no pude rehabilitarme, pues primero me dijeron que se había elongado el tendón rotuliano y a partir de ahí empezó a complicarse todo más.
Al operarme de ese tendón, a finales de 2008, me dicen que tengo un cavernoma cerebeloso, un tumor del cerebro. Al operármelo, de 12 pares nerviosos que tenemos en el cuerpo, yo me quedé con 10, perdí el nervio facial y otro más, pero también quedé con daño motor que afectó a mi brazo y a mi pierna derecha, no tenía fuerza en ellos.
Todo en el lado derecho. Con lo que mi rodilla necesitaba una rodillera especial, para poder caminar, además de una ayuda con bastón y de sufrir un dolor continuo, que me obligaba a tomar analgésicos y antiinflamatorios.


Estabilización en extensión con clavo intramedular cementado con cemento cargado con varios antibióticos.
Tal era mi desesperación que, un día, mirando en internet, leo y pongo atención a todo lo que había del Dr. Villanueva. Llamé y fui a su consulta –sin conocerle de nada- y salimos con buena impresión, pues escuchó todo el tema con mucha atención.
Correría el 2015 cuando yo fui a su consulta. Me pareció una persona tan legal, que te ve con tantos problemas en ese momento y que te escucha con toda la atención que tú necesitas, que se involucra, que decidí seguir sus consejos.
El Dr. Me recomendó un libro para leer “Ante todo no hagas daño” de Henry Marsh. Para mí fue de gran ayuda. Seguí yendo a su consulta alguna vez. Incluso en otra visita llamó a unos colegas para que vieran mi rodilla y dieran también su opinión sobre mi caso.
Luego el Dr y su equipo se cambiaron de consulta y yo en el 2020, en plena pandemia, tuve una caída en casa y acudí a urgencias. Me provoqué una fractura de clavícula y no pude apoyar pues tenía mucho dolor, por lo que tuve una inmovilización de la pierna durante un mes. Se alargó la recuperación y llegaron Navidades.
En enero del 2021 acudo al Dr Villanueva y rápido se organizó todo para operarme la rodilla. A pesar de la pandemia –tuve que ir y estar sola en el hospital- el 8 de febrero me hizo la operación de artrodesis de rodilla y a la mañana siguiente estaba ya levantada. Pero lo mas importante, es que lo hacía SIN DOLOR. Al día siguiente comí en casa. Y el 23 de febrero ya salí a la calle a caminar.
A partir de ahí mi vida ha cambiado, tengo otro estado de ánimo y sobre todo NADA DE DOLOR.
Así algo que pensé que iba a retroceder ha servido para seguir adelante.
Desde aquí mando todo mi cariño a ese equipo completo porque, como mínimo, es lo que se merecen.
📃 ✍️ Isabel Macías Velázquez
Artrodesis de rodilla. Comentario del especialista.
Isabel es una paciente muy tenaz y luchadora. Ha tenido que vivir con las secuelas de su tumor, con la deformidad de la cara y la debilidad del hemicuerpo derecho y siempre ha tenido una actitud enormemente positiva, pero también objetiva, de su enfermedad, lo que hace que sea más fácil hablarle de cirugías difíciles, complicaciones o expectativas.
La artrodesis de rodilla se considera una técnica de salvamento, no de restitución de la función completa de la rodilla, pues esta va a perder el juego. Actualmente se reserva para pacientes debilitados, operados muchas veces, por infección o por otras causas, o que han perdido el mecanismo extensor y no quieren afrontar una cirugía de reconstrucción del mismo con un gran injerto; o en los que las condiciones locales contraindican poner una nueva prótesis de rodilla o hacer un trasplante completo del mecanismo extensor, como hemos visto en otros pacientes y en otros capítulos de esta web. Esta operación es, cada vez, menos utilizada.
Hay dos formas de artrodesis de rodilla.
☑️ Una es hacer que se una el hueso del fémur con el hueso de la tibia, en este caso en la rodilla. Esta forma de fusión o artrodesis, puede llevar meses o más de un año, hasta conseguirla y no es fácil cuando hay pérdida de hueso, como en el caso de Isabel, porque se ha perdido con la prótesis que tenía puesta. Esta es la verdadera artrodesis de rodilla.
La otra es una falsa artrodesis de rodilla, también llamada “estabilización en extensión”, en la que damos soporte y estabilidad instantáneas a la rodilla cementando un clavo al hueso de la paciente, al fémur y a la tibia. Tiene ventajas, como el apoyo inmediato, la fijación con cemento con doble antibiótico para reducir el riesgo de infección y que todo se hace en una cirugía sin esperar a ver si el hueso une o no. Esta es la artrodesis de rodilla que realizamos a Isabel.

En el caso de Isabel estaba indicada porque no tenía fuerza en la pierna por la lesión que el tumor le dejó en el cerebro, lo que le causaba una debilidad de la pierna que hubiera provocado inseguridad y caídas frecuentes con una prótesis.
Aunque le hubiéramos reconstruido el mecanismo extensor con un injerto completo nunca hubiera podido usarlo para extender la pierna o doblarla, pues la musculatura le fallaba por la debilidad de la operación del cerebro.
En estos casos, darle soporte a la pierna para que no se doble cuando camina y evitar que la paciente se caiga, es la prioridad.
La cirugía de artrodesis de rodilla fue muy bien, se le han ido los dolores y puede apoyarse en su pierna desde los primeros instantes.
El problema es que, cuando se sientan, la pierna queda estirada, y esto es algo incómodo, pero más llevadero en personas más bajas y con flexibilidad en la columna y otras articulaciones para poder vestirse o calzarse correctamente.
Gracias Isabel por su testimonio, por su cariño y confianza y por su optimismo, pese a todos sus problemas y por ser de ayuda con su colaboración y testimonio para otros pacientes.
FAQ’s sobre la artrodesis de rodilla.
🤔 ¿Cuál es la diferencia entre una prótesis de rodilla y una artrodesis?
La prótesis sustituye la articulación y mantiene movimiento, mientras que la artrodesis fusiona la rodilla, eliminando el dolor pero suprimiendo la movilidad.
🏥 ¿En qué casos se recomienda la artrodesis en lugar de una prótesis?
Se reserva como técnica de salvamento cuando no es posible implantar una prótesis: infecciones repetidas, pérdidas óseas graves, fracaso de múltiples cirugías o imposibilidad de reconstruir el mecanismo extensor.
⏳ ¿Cuánto tarda en consolidar una artrodesis de rodilla?
Si se hace con unión ósea directa, la fusión puede tardar de 6 meses a más de un año. Con técnicas de estabilización cementada, la fijación es inmediata.
🦵 ¿Se puede caminar con normalidad después de una artrodesis de rodilla?
Sí, aunque con limitaciones: la pierna permanece rígida en extensión, lo que impide flexionar la rodilla, pero permite un apoyo estable y sin dolor.
👩⚕️ ¿Qué complicaciones puede tener una artrodesis de rodilla?
Entre las más frecuentes están la dificultad para sentarse o agacharse, molestias lumbares por la rigidez y, en casos con fijación ósea, riesgo de que la fusión no se complete.
🧑🦽 ¿La artrodesis es una solución definitiva o temporal?
En la mayoría de los pacientes es una solución definitiva de soporte y control del dolor. En casos seleccionados puede considerarse más adelante una reconstrucción del mecanismo extensor y de la función de la rodilla con un recambio por una prótesis especial, pero es poco habitual.

Artículo escrito y verificado por el especialista en traumatología Dr. Villanueva.
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