¿Es normal que duela una prótesis de rodilla?.
¿Es Normal que me Duela la Rodilla Después de Ponerme la Prótesis?.
Puede ser normal que haya ciertas molestias tras la cirugía de prótesis de rodilla y que estas molestias duren incluso durante semanas o meses después de puesta, después de implantar la prótesis.
Pero, cuando hayan transcurrido unos meses, una prótesis de rodilla no debería doler.
En realidad, las prótesis las hemos puesto para que el paciente no sienta dolor y recupere su función, su calidad de vida.
Ciertas molestias si puede ser normales. Algunos pacientes acusan los cambios de tiempo (en ésta y otras cirugías), o si hacen esfuerzos muy intensos cómo subir o bajar escaleras con mucho peso.
Estas actividades pueden hacer que el paciente pueda resentirse un poco; pero de esa molestia de recuperarse de una forma natural, sin medicación.
Por lo tanto, para descartar si estamos ante una prótesis de rodilla dolorosa o ante un dolor normal, propio de la cirugía de prótesis de rodilla, evaluaremos si ha transcurrido el tiempo estimado de recuperación.
Si bien estos plazos varían de unos pacientes a otros, en general, los dolores desaparecen entre las 4ª y la 6ª semanas desde la cirugía, aunque siga teniendo alguna molestia (que no dolor).
La recuperación total de una cirugía, incluida la de prótesis de rodilla, puede no llegar a alcanzarse hasta el año o 18 meses desde la intervención.
Por lo tanto, si transcurridos 2-3 meses desde la cirugía notamos un dolor anormal, ya no relacionado con la cirugía en si; es decir si una prótesis de rodilla duele; hemos de consultar a nuestro cirujano. Nuestro especialista en cirugía ortopédica de rodilla deberá investigar la causa y qué es lo que no termina de estar bien en esa prótesis.
Las principales causas de revisión precoz de rodilla por dolor, antes de 2 años desde la implantación de la prótesis, son: la infección, la inestabilidad y la malposición de los componentes.
VER:
☑️Prótesis de Rodilla Dolorosa
Una prótesis de rodilla dolorosa puede pertenecer a dos categorías:
⏩ prótesis de rodilla dolorosa séptica o infectada
⏩ prótesis de rodilla dolorosa aséptica o no infectada.
Cuando la prótesis de rodilla duele por infección, hemos de precisar qué tipo de infección o su clasificación; que puede ser aguda subaguda o crónica o tardía hematógena.
Entre las prótesis de rodilla no infectadas dolorosas el cirujano ha de ser capaz de analizar:
✅ cuál es la situación de los tejidos,
✅ situación o estado de las partes blandas,
✅ establecer de si hay o no pérdida de hueso,
✅ saber si ha habido problemas respecto a la fijación de la prótesis al hueso
✅ averiguar porqué se ha aflojado
y, además,
☑️ ha de conocer las técnicas de reconstrucción deshueso de ligamentos
qué modelos de prótesis se adaptan mejor o son los ideales para resolver el caso concreto de nuestro paciente, para obtener el mejor resultado posible.
Para ello, es fundamental tener una especialización muy alta en el recambio de prótesis para obtener los mejores resultados clínicos.
Vídeo las Prótesis de Rodilla no deben doler.
Causas por las que puede doler una prótesis de rodilla.
Las causas por las que una prótesis de rodilla duele se dividen en:
➡️ extrínsecas, es decir, ajenas a la propia prótesis y a su función e
➡️ intrínsecas, es decir, las relacionadas con la implantación, la alineación, la movilidad u otros problemas de la propia prótesis.
Causas extrínsecas que pueden hacer que duela una prótesis de rodilla:
– Patologías de la cadera o de la columna (estenosis del canal lumbar, hernia discal, problemas degenerativos),
– Síndrome de Dolor Regional Complejo (SDRC),
– Complicaciones vasculares,
– Fracturas periprotésicas,
– Osificaciones heterotópicas,
– Bursítis y tendínitis periarticulares,
– Enfermedades generales (Paget, artrítis reumatoide) o
– Enfermedades locales (sinovítis villonodular pigmentada y otras sinovítis crónicas),
– Patología del tobillo y pie que condicione una alteración de la marcha (ej, pie plano)…, entre otras.
Causas intrínsecas que pueden hacer que duela una prótesis de rodilla
– Infección articular,
– Inestabilidad y
– El aflojamiento aséptico.
– La artrofibrosis o la rigidez de la rodilla puede ser secundaria a:
una mala técnica quirúrgica,
por desequilibrio de los espacios en flexión y extensión,
por liberación inadecuada de los ligamentos colaterales,
por sobredimensión de los componentes articulares o
por mala alineación de los mismos,
o puede ser idiopática, de causa desconocida.
– La mala posición de los componentes o el mal equilibrio de las partes blandas pueden facilitar el desgaste precoz del polietileno o la rotura del mismo.
– Los problemas del aparato extensor son una causa frecuente de dolor. Estos incluyen:
la mala alineación rotuliana,
la lesión del tendón rotuliano o cuadricipital,
la fractura de la rótula,
la rótula alta o baja por fibrosis o por mala técnica quirúrgica
los pinzamientos de partes blandas, como el llamado resalte patelar, que pueden asociarse al diseño de algunas prótesis o a mala liberación y equilibrado de las estructuras de la rodilla.
